Suiza sigue adelante con su intención de regular integralmente nuestra amada planta. Tras legalizar el uso medicinal del cannabis pensando en la exportación, ahora inicia una prueba piloto de acceso a cannabis no médico en farmacias.
A partir del 15 de septiembre hasta 370 personas mayores de edad y residentes en la ciudad de Basilea, previo registro, podrán comprar en 9 farmacias 4 variedades de flores secas y 2 tipos de preparados (hachís), todos psicoactivos. El precio por gramo oscila entre 8 y 12 francos. El objetivo es doble: recabar datos para la futura implementación de la regulación y reducir el mercado negro.
El proyecto piloto está dirigido y participado por la Universidad de Basilea, clínicas psiquiátricas de la ciudad y el departamento de salud cantonal. En abril fue aprobado por la Oficina Federal de Salud Pública. Además de Basilea, también las ciudades de Zúrich, Ginebra y Berna han solicitado iniciar pruebas similares de acceso a cannabis no médico en farmacias. Todos estos ensayos están contemplados en el proyecto de regulación debatido y votado en 2020. Una vez recogidos sus resultados, se decidirá si la ley entra en vigor o debe modificarse. Desde aquí no podemos sino alegrarnos por Suiza, que está realizando los pasos necesarios hacia la regulación integral del cannabis. Esos mismos pasos que, tarde o temprano, aquí también tendremos que emprender.